Las luchas de EGOS en la venta
Enfrascado en el desarrollo del temario de técnicas de venta para el próximo curso, empiezo a repasar anécdotas que me enseñaron mucho. Recuerdo cuando me echó de su casa insultándome y casi a patadas, aquel señor mayor de la vega baja, de nombre Benancio, al escuchar el precio de mis productos. Y como luego vino a buscarme al coche para que entrara a firmar el contrato, argumentando que ahora sí sabía que yo le había dado el mejor precio que podía darle, porque había superado “la prueba”. También recuerdo cómo, cansado de recibir negativas en todos los clientes que visitaba, porque en esa zona todos le compraban a un competidor concreto, entré en las oficinas de ese competidor a venderle mis productos. El gerente me miraba con los ojos como platos y buscaba las cámaras ocultas por si era una broma de la televisión. A los dos meses, me llamaba para hacer una alianza para poder vender ellos nuestros productos, que eran de mejor calidad, y así podía cerrar su planta de producción que...